Capítulo 21: Al agua móvil.

-¡A mi madre le ha tocado la lotería así que nos vamos a la playa!

Estaba super feliz, era increíble esto que nos estaba pasando, era increíble él...

-Jo, Rob, ahora me siento culpable...

-¿Por qué?

-Porque te has gastado muchísimo dinero en mi y yo te lo tengo que devolver.

-¿Tú estás mal de la cabeza? No me tienes que devolver nada, te lo regalo porque quiero y punto.

Le besé, me abracé a él y me quedé dormida. Dormí casi todo el trayecto, lo que quedaba estuvimos escuchando música.

Cuando llegamos Rob pidió la llave de nuestra habitación y fuimos corriendo hasta el ascensor. Estaba en la 1ª planta y era enorme. Dejé rápidamente las maletas y fui a ver el baño, quedé fascinada:

Íbamos vestidos tan elegantes, éramos la pareja perfecta. Él me vendó los ojos, me cogió de la mano y me llevaba...

-Ey, ¿a dónde me llevas?-preguntaba intrigada-.

-Ahora lo verás, espero que te guste.

Cuando llegamos me quitó la cinta que me cubría los ojos y...

-woW-pensé-.

Era un restaurante precioso y muy lujoso. Todo el mundo iba vestido muy elegante, menos mal que me cambié de ropa jajaja.

Nos sentamos en una mesa al lado de la ventana, había unas vistas espectaculares...

Cuando acabamos de comer nos sirvieron el postre, estaba muy rico. No podíamos más, estabamos llenísimos.

-¿Te apetece dar una vuelta por el paseo marítimo, princesa?-me preguntó Rob-.

-Claro-le sonreí-.

Él pidió la cuenta, tardaron unos 10 minutos en traerla. Después pagó y nos fuimos a nuestra habitación a cambiarnos.

Me puse esto:

-Si esque estás preciosa con lo que te pongas.

-Gracias, igual que tú-dije sonrojada-.

Cogimos las llaves y la cámara y nos fuimos.

Se estaba muy bien, hacía calor pero también venía un vientecillo frío. Mi pelo rubio oscuro/castaño claro volaba. Rob había comprado una toalla de Bob Esponja.

Él sabía que me encantaba. La llevamos con nosotros, la extendimos en la arena al lado de una palmera y nos sentamos allí a sentir el movimiento de las olas. Era tan relajante...

Después de estar sentados casi una hora fuimos a una heladería que estaba a 10 minutos de allí. Cuando llegamos ya eran las 22:24.

Yo pedí uno de stracciatella y menta con trocitos de chocolate y Rob uno de chocolate blanco y almendras. Tenía una buenísima pinta y más les valía, cada helado valía 8,76€...

Seguimos dando un paseo por aquella calle, había muchas tiendas, bares, restaurantes, chiringuitos, parques, puestos... Ví uno que me llamó la atención, tenía cosas muy coloridas.

Debería comprar unos imánes de recuerdo. Me llevé 6 y cómo no mi queridísimo novio no me dejo pagar (-.-).

Eran casi las 23:30 así que le dije que deberíamos irnos al hotel y estar ahí.

Cuando llegamos estaba sonando mi móvil, me lo había dejado en la habitación sin darme cuenta. No me dio tiempo para cogerlo. Miré a ver quién era.

Era de John y tenía otras 11 llamadas perdidas suyas.

-¿Qué querrá?-pregunté para mis adentros-.

Mientras Rob se cambiaba le llamé. Iba hablando por teléfono mientras me metía en el jacuzzi.

--------------------Conversación telefónica--------------------

Yo:Emm, hola John, ¿qué querías?

John: Creo que ya es el momento de decirte por quién he dejado a Dana.

Yo: Vale, adelante.

John: Esa chica...

-Pí, pí, pí-Se oía desde debajo del agua-.

Sí, se me cayó el móvil al jacuzzi.